¡Hola, amantes de los jardines y aficionados a las aves! Si estás aquí, probablemente has experimentado esa mezcla de emoción y desesperación que viene con tener un jardín lleno de hermosas plantas… y un grupo de gallinas juguetonas que parecen empeñados en destruirlo todo.
No te preocupes, yo he pasado por lo mismo, y quiero compartir contigo algunas estrategias que me han funcionado para proteger mis queridas plantas de los traviesos pollos. Aquí van 5 formas de mantener la paz (y el verdor) en tu jardín.
1. Campanas
Imagina este escenario: pasas horas plantando semillas, regándolas y cuidándolas con amor. Finalmente empiezan a crecer, y cuando menos te lo esperas, ¡zas!, una gallina decide que tus tiernas plantitas son el almuerzo perfecto. ¿Qué hacer en una situación así? ¡Ponles campanas!
Las campanas son pequeñas jaulas que actúan como una barrera de protección para tus plantas. Evitan que las aves, ardillas, ciervos y otros animales se acerquen y arruinen todo tu trabajo duro. Es como si les pusieras una capa de invisibilidad a tus plantas, así pueden crecer felices y sanas sin preocupaciones.
Además, las campanas no solo protegen tus plantas de los animales, sino que también ayudan a mantenerlas a salvo de las inclemencias del tiempo. En días ventosos, las plantas pueden verse afectadas por el viento excesivo, pero con las campanas actuando como escudo, se mantienen protegidas.
¿Y sabes qué es lo mejor de todo? Las campanas se pueden comprar o hacer en casa. ¡También puedes utilizar papeleras de malla de alambre! Hago mis campanas con alambre de gallinero, pero también puedes usar una malla de alambre más resistente.
Así que la próxima vez que vayas a sembrar tus plantas favoritas, no dudes en colocar unas cuantas campanas. Verás cómo tus plantas crecen felices y sin problemas, y tú podrás disfrutar de tus cultivos sin tener que preocuparte por los intrusos no deseados. ¡Las campanas son realmente increíbles! ¡No esperes más y consigue las tuyas ahora mismo! ¡Tu jardín te lo agradecerá!
2. Rocas
Si tienes plantas establecidas pero quieres proteger sus raíces, una excelente opción es rodearlas con piedras o rocas de tamaño mediano a grande.
Las rocas no solo agregan un toque decorativo al jardín, sino que también ayudan a proteger el área del cepellón de la planta. Esta técnica es especialmente útil si tienes gallinas que les encanta escarbar en tus macizos de flores. Yo personalmente he utilizado esta técnica con muchas de mis plantas perennes que se encuentran en el territorio de mis gallinas, y debo decir que ¡funciona de maravilla!
Al rodear las raíces de las plantas con piedras, evitamos que las gallinas causen daño al cepellón al escarbar alrededor de la planta. Sin las piedras, he experimentado daños mayores en las raíces de mis plantas, ya que las gallinas tienden a exponer el cepellón al escarbar alrededor de la planta.
Sin embargo, descubrí que la mejor forma de hacerlo es manteniendo las rocas cerca de la base de la planta. De esta manera, las gallinas no pueden acceder al espacio entre las rocas y la planta, lo que garantiza una protección efectiva para las raíces.
Además, puede ser una excelente idea combinar las rocas con una carretilla decorativa llena de plantas y piedras decorativas. De esta forma, no solo protegemos las raíces de nuestras plantas, sino que también añadimos un toque estético único a nuestro jardín.
3. Ramas y arbustos
Mi vecina realmente me dio este genial consejo para proteger las plantas del jardín de las gallinas! Desafortunadamente, ella tuvo que usarlo porque nuestras gallinas empezaron a saquear sus plantas frutales recién plantados – ¡qué vergüenza!
Puedes colocar palos grandes o ramas en forma de cruz alrededor de la base de tus plantas para protegerlas, de manera similar a cómo usarías las rocas. Recientemente comencé a usar este método en mis camas elevadas para proteger el suelo expuesto donde he sembrado semillas recientemente.
A las gallinas les encanta el suelo expuesto y cavaran en él cada vez que puedan. Pero, una vez que lo cubro con algunas ramas, lo dejan en paz. Este método permite que las semillas aún reciban suficiente luz para germinar.
Una vez que estén establecidas, retiro las ramas según sea necesario o las dejo en su lugar para llenar los espacios abiertos entre las plantas.
4. Pisos/bandejas
No recuerdo exactamente dónde aprendí este pequeño truco, ¡pero funciona increíblemente bien! Una vez que siembras tus semillas, en realidad puedes voltear una bandeja plana de semillas boca abajo y usarla para proteger la tierra recién sembrada.
He descubierto que a veces necesito asegurar las bandejas o colocar una roca grande sobre ellas para que las gallinas no las revuelvan.
También he notado que las bandejas planas funcionan muy bien para proporcionar la cantidad justa de sombra y ayuda a mantener la tierra húmeda, lo cual es vital para el desarrollo de las semillas.
Esto es especialmente útil cuando estás sembrando semillas durante las olas de calor, cuando el suelo se seca más rápido.
Es increíble cómo algo tan simple como dar la vuelta a una bandeja puede marcar la diferencia en el éxito de tus semillas. Además, reutilizar las bandejas de esta manera es una forma ingeniosa de aprovechar al máximo lo que ya tienes en casa.
5. Alambre
Mi solución de confianza y probada para proteger las plantas de las gallinas ¡es una jaula de alambre! Pero, en lugar de utilizarlo como cercado, lo coloco en el suelo para proteger las semillas germinadas y las plantas jóvenes.
Mi cercado favorito para usar con este propósito es el de alambre soldado de 2″x4″. Es lo suficientemente resistente para mantener a raya a las gallinas, pero es ligero y fácil de trabajar.
Por lo general, solemos tener un rollo a mano, así que simplemente corto lo que necesito para que se ajuste al espacio de crecimiento. Sin embargo, puedes utilizar diferentes tipos de alambre de cercado para este propósito, desde alambre tejido hasta cercas decorativas pequeñas de jardín, ¡y todos funcionan perfectamente!
Hay dos métodos que suelo utilizar al colocar los paneles de alambre en el suelo. Para las áreas donde las gallinas remueven mucho la tierra, siembro mis semillas/plantas y luego coloco el alambre sobre ellas, plano contra el suelo.
Las plantas luego crecerán entre los alambres y el alambre permanece en su lugar para disuadir el removido durante toda la temporada de crecimiento.
El segundo método funciona mejor para áreas que no son tan intensamente revueltas por las gallinas. Doblo un trozo grande de alambre de modo que cree una ligera curva.
Luego, lo coloco sobre la tierra recién sembrada o las plántulas, asegurándome de que el alambre esté doblado lo suficiente como para darles un poco más de espacio para crecer.
Una vez que las plantas hayan madurado lo suficiente como para estar cerca de tocar el alambre, retiro el alambre para que puedan seguir creciendo.
Conclusión
Tener gallinas y un jardín hermoso al mismo tiempo puede parecer un reto, pero con estos consejos es totalmente posible. Probar diferentes métodos y combinarlos según las necesidades de tu jardín y el comportamiento de tus pollos es la mejor manera de encontrar la solución perfecta. Y ante todo, recuerda que la paciencia y la creatividad son tus mejores aliados.
Esperamos que estas 5 formas de proteger tus plantas del jardín te sean útiles. ¿Tienes algún truco que no hayamos mencionado? ¡Nos encantaría saberlo! Déjanos tus comentarios y comparte tus experiencias con nuestra comunidad.